22 agosto, 2010

Dialogues with the devil



Dialogos con el diablo es un libro raro. Raro porque es difícil de encontrar. La última reimpresión data de 1983, fue una impresión especial con copias limitadas. En un momento de mi vida tuve acceso a una copia en español de la impresión de 1973. El contenido tuvo un impacto en mi respecto a mi punto de vista de las criaturas espirituales y especialmente, de Lucifer. Recientemente, conseguí una copia en inglés de la impresión de 1983, gracias a Dios, existe Amazon.

El libro consta de una serie de cartas entre Miguel y Lucifer. En dicha serie de cartas, ambos personajes, discuten, plantean preguntas y narran como fue la caida de otros mundos en los que el ser humano habitaba.

Además de las primisas de corte filosofíco y teologíco dentro del libro. También existen algunas frases que empujan al concepto tradicional de femeinidad y famila. Rechazando el movimiento feminista (a pesar de que la autora es feminista) y el movimiento lesbico-gay.

El libro incluye también criticas al desarrollo cientifíco y al uso arbitrario de la tecnología creada para la destrucción de la propia raza humana. Realiza menciones a la bomba atomica, la bomba de hidrógeno, el acelerador de particulas, el socialismo y el nazismo. Hay menciones a personajes como Lenin, Marx y Freud.

Es un gran material de reflexión para encontrar el camino al significado de ser humano. Y provee un punto de vista distinto, amigable y hasta humanizado del demonio, proponiendo que es él, el esclavo del hombre y no al revés. Pues como creaciones de Dios poseemos libre albeldrio y no estamos ligados a un solo destino ni a las maldades del diablo. El diablo solo tienta, aconseja, propone, es el hombre quien decide escucharlo y seguirlo hasta las ultimas consecuencias, siguiendo siempre la razón sin involucrar los sentimientos o la consciencia. El diablo se aprovecha de la ambición del hombre para lograr sus propositos, llevando a cada ser humano a atacar a otro para ser "el mejor". Y junto con el listado de formas para la condenación, también viene el perdón y la absolución. La revelación máxima del daño causado y el aceptar la responsabilidad de los actos propios.

El libro finaliza con una escena, estremecedora y una pregunta que tienta a los mismos ángeles ¿Es Dios omnsiciente? Cada quien puede darle la respuesta que quiera, yo la desconosco, puede ser que Dios si sea omnisciente, pero en pro del libre albeldrío, se hace el de la vista gorda.

Bendiciones,

No hay comentarios.: