Esta entrada no tiene título, por algo muy sencillo: No puedo definirla.
Esta semana me puse a depurar mi teléfono, borre mensajes que tenía guardados desde el 2007, algunos llenos de palabras hermosas que ahora carecen de su tierno significado. Otras de palabras de cariño que ahora estan grabadas en mi corazón. Recorriendo esos pequeños mensajes, rememoré momentos en los que mis amigos han estado ahí, a mi lado. Recordé esos momentos que han marcado mi vida y forjado mi carácter y es innevitable incluir aquí a todos los inculpados en que haya mejorado mi vida, no por nombre, ni mencionando los detalles que han tenido para conmigo, simplemente ellos ya saben lo que para mi significan.
Recorde también a un gran amigo, que ya no está en mi vida, aquel que me rescató de una fosa pantanosa y me forzó a buscar en mi a la mujer que ahora soy... a el le guardo un gran cariño y mucho respeto. Le añoro, sí, más no le extraño.
Así como recuerdo a los amigos de los cuales perdí la pista, Yuye, Bere, Klau, Daniel, Clemente... Y veo a los amigos que están conmigo ahora, que más que cuidarme, me acompañan, me aconsejan, son mis confidentes y me demuestran cariño.
Entre esos mensajes perdidos, conseve los que contienen los mejores consejos que un amigo puede dar "No te rindas", "Qué no te afecte", "Estás más linda", "Cuentas con mi apoyo" y muchas otras frases que se han grabado en mi mente, frases dichas de frente o por conversaciones, debo decir que agradezco profundamente que no me hayan dado por mi lado diciendo frases que alentaran la postura de victíma que llegue a adoptar. El apoyo que recibo de ellos ha traspasado la barrera de la distancia y la diferencia de husos horarios, y como me gustaría pasar una noche en blanco en Madrid con un buen guía... tal vez, en otra ocasión. Y es la amistad la que ha pasado la prueba más dolorosa de todas, la distancia y el tiempo, el alejamiento, la aparente indiferencia y apatía.
Otros mensajes que conserve son aquellos en los que había un dejo de amor plátonico, de admiración oculta, de cariño entrañable... tímidas insinuaciones que corrieron durante el año pasado entre dos teléfonos... Y que en una excursión al campo, terminó por convertirse en un amor abierto.
Claro, también había toneladas de mensajes de amor, mensajes que me mantuvieron confusa y pendiendo de un hilo por 12 largos meses. Y reflexioné, ¿por qué con el no?... ¿por qué con el no me sentía motivada?, ¿por qué el tunel de frustración, desesperación y depresión prarecia interminable? ¿por qué encuentro que ahora hay una luz que guía mi camino en un tunel, a veces oscuro, a veces claro? Tal vez fuí amada, sin duda idealizada. Nanche ahora, me indica que soy amada, tal y como soy; con mi muletilla gatuna:"miau", comportandome como niña dulce o como mujer de caráter, de floja o hiperactiva. Igual de innevitables que los recuerdos es preguntar, ¿por qué? Porqué los seres humanos somos seres de luz, algunos se aferran a la idea de caminar junto a su pareja por los túneles más oscuros de la vida. Cuando eso sucede, el que debe enfrentar la oscuridad, se ve cegado por la luz que ambos emiten, y piensa falsamente que las tribulaciones terminaron. Y cuando uno de los dos se aleja del otro, la oscuridad regresa, acentuada y atemorizante... porque el tunel continua. Porque la salida puede que esté cercana o lejos, pero no sabemos donde está, y llamamos a nuestras parejas, extrañando esa luz que nos proporcionan, ese calor... que no reconocemos en nosotros. Ahora, yo recorro mis túneles oscuros sin compañía, sin más luz ni calor que el mio, si tropiezo, soy yo, si caigo, soy yo... y a lo lejos, indicandome la salida, brilla una luz, la luz que ahora guía mi camino y es tan bella esa luz, que me esfuerzo el doble para alcanzar la salida y reunirme con el, si seré caballito de carrera en entrenamiento.
Y yo... no se si soy buena amiga, me siento halagada cuando alguien me llama para confiarme una preocupación, a veces he fallado, a veces me quedo sin palabras, y es que en eso de tener amigos, no tengo mucha experiencia, aunque algunos dicen, que lo importante es escuchar con todos los sentidos lo que tienen que decirte. Y cuando alguien me comenta algo y esperan una reaccion... hay veces que no se como reaccionar, y simplemente suelto una retalía de palabras con o sin sentido... Me disculpo por eso, tratare de letrarme más.
Amigos, amor y familia... Las tres cosas que nos hacen mejores humanos, y al final, las tres, son la misma cosa: GENTE QUE NOS AMA.
Bendiciones, ¡Feliz día de San Valentín!
Esta semana me puse a depurar mi teléfono, borre mensajes que tenía guardados desde el 2007, algunos llenos de palabras hermosas que ahora carecen de su tierno significado. Otras de palabras de cariño que ahora estan grabadas en mi corazón. Recorriendo esos pequeños mensajes, rememoré momentos en los que mis amigos han estado ahí, a mi lado. Recordé esos momentos que han marcado mi vida y forjado mi carácter y es innevitable incluir aquí a todos los inculpados en que haya mejorado mi vida, no por nombre, ni mencionando los detalles que han tenido para conmigo, simplemente ellos ya saben lo que para mi significan.
Recorde también a un gran amigo, que ya no está en mi vida, aquel que me rescató de una fosa pantanosa y me forzó a buscar en mi a la mujer que ahora soy... a el le guardo un gran cariño y mucho respeto. Le añoro, sí, más no le extraño.
Así como recuerdo a los amigos de los cuales perdí la pista, Yuye, Bere, Klau, Daniel, Clemente... Y veo a los amigos que están conmigo ahora, que más que cuidarme, me acompañan, me aconsejan, son mis confidentes y me demuestran cariño.
Entre esos mensajes perdidos, conseve los que contienen los mejores consejos que un amigo puede dar "No te rindas", "Qué no te afecte", "Estás más linda", "Cuentas con mi apoyo" y muchas otras frases que se han grabado en mi mente, frases dichas de frente o por conversaciones, debo decir que agradezco profundamente que no me hayan dado por mi lado diciendo frases que alentaran la postura de victíma que llegue a adoptar. El apoyo que recibo de ellos ha traspasado la barrera de la distancia y la diferencia de husos horarios, y como me gustaría pasar una noche en blanco en Madrid con un buen guía... tal vez, en otra ocasión. Y es la amistad la que ha pasado la prueba más dolorosa de todas, la distancia y el tiempo, el alejamiento, la aparente indiferencia y apatía.
Otros mensajes que conserve son aquellos en los que había un dejo de amor plátonico, de admiración oculta, de cariño entrañable... tímidas insinuaciones que corrieron durante el año pasado entre dos teléfonos... Y que en una excursión al campo, terminó por convertirse en un amor abierto.
Claro, también había toneladas de mensajes de amor, mensajes que me mantuvieron confusa y pendiendo de un hilo por 12 largos meses. Y reflexioné, ¿por qué con el no?... ¿por qué con el no me sentía motivada?, ¿por qué el tunel de frustración, desesperación y depresión prarecia interminable? ¿por qué encuentro que ahora hay una luz que guía mi camino en un tunel, a veces oscuro, a veces claro? Tal vez fuí amada, sin duda idealizada. Nanche ahora, me indica que soy amada, tal y como soy; con mi muletilla gatuna:"miau", comportandome como niña dulce o como mujer de caráter, de floja o hiperactiva. Igual de innevitables que los recuerdos es preguntar, ¿por qué? Porqué los seres humanos somos seres de luz, algunos se aferran a la idea de caminar junto a su pareja por los túneles más oscuros de la vida. Cuando eso sucede, el que debe enfrentar la oscuridad, se ve cegado por la luz que ambos emiten, y piensa falsamente que las tribulaciones terminaron. Y cuando uno de los dos se aleja del otro, la oscuridad regresa, acentuada y atemorizante... porque el tunel continua. Porque la salida puede que esté cercana o lejos, pero no sabemos donde está, y llamamos a nuestras parejas, extrañando esa luz que nos proporcionan, ese calor... que no reconocemos en nosotros. Ahora, yo recorro mis túneles oscuros sin compañía, sin más luz ni calor que el mio, si tropiezo, soy yo, si caigo, soy yo... y a lo lejos, indicandome la salida, brilla una luz, la luz que ahora guía mi camino y es tan bella esa luz, que me esfuerzo el doble para alcanzar la salida y reunirme con el, si seré caballito de carrera en entrenamiento.
Y yo... no se si soy buena amiga, me siento halagada cuando alguien me llama para confiarme una preocupación, a veces he fallado, a veces me quedo sin palabras, y es que en eso de tener amigos, no tengo mucha experiencia, aunque algunos dicen, que lo importante es escuchar con todos los sentidos lo que tienen que decirte. Y cuando alguien me comenta algo y esperan una reaccion... hay veces que no se como reaccionar, y simplemente suelto una retalía de palabras con o sin sentido... Me disculpo por eso, tratare de letrarme más.
Amigos, amor y familia... Las tres cosas que nos hacen mejores humanos, y al final, las tres, son la misma cosa: GENTE QUE NOS AMA.
Bendiciones, ¡Feliz día de San Valentín!
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